El páncreas protege los riñones produciendo bicarbonato de sodio, pero a veces producen más cantidades de la enzima como resultado de nuestra nutrición.
Si nuestra alimentación diaria contiene más azúcares y grasa de lo que normalmente deberíamos comer, nuestros riñones están trabajando en exceso y producen menos de bicarbonato de sodio. Si nuestro cuerpo contiene menos bicarbonato de sodio que de costumbre los ácidos no serán neutralizados y pueden causar problemas de salud.
Se ha demostrado que el bicarbonato de sodio puede ser muy útil para nuestro organismo, ya que sus efectos sobre los cálculos renales son muy beneficiosos y podemos frenar el progreso.
El sodio por lo general mantiene los riñones en forma y si se ven amenazados de alguna manera con menos sodio en nuestro cuerpo comienzan a producir más y más de lo mismo. Si por alguna razón no pueden producir suficiente y no pueden transferir en la orina, el sodio irá en nuestra sangre y se llena de ácido. Hasta que no empiecen a trabajar de nuevo con normalidad y transfieren el sodio en la orina de la sangre se mantendrá llena de ácidos.
El consumo de bicarbonato de sodio siempre puede ser útil. Evita que los riñones trabajen más y neutraliza los ácidos de los alimentos que consumimos. El uso de bicarbonato de sodio No se detiene en los riñones. Las personas con cáncer utilizan para luchar con el mal efecto de la quimioterapia o es útil también en casos de productos químicos y toxinas más dosis.
EL USO DE BICARBONATO DE SODIO
Tomar media cucharadita de bicarbonato de sodio y se pone debajo de la lengua en el primer día. Para los siguientes días tomar una botella de agua de 1,5 litros y poner dentro de una cucharadita de soda y la mitad de una cucharadita de sal de mesa. Beberla.
Recomendamos No comer comida chatarra. Alimentos poco saludables siempre se pueden tener un efecto negativo directo y una gran cantidad de complicaciones.
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